Este miércoles, 31 de octubre, se celebra el Día Mundial de las Ciudades, una jornada que tiene como objetivo impulsar la cooperación entre ciudades del mundo por lograr un desarrollo urbano sostenible y mostrar la necesidad de estar preparados para los desafíos que plantea la sobrepoblación en las ciudades.
En este año, el Día Mundial de las Ciudades (#CitiesDay) se centrará en la construcción de ciudades sostenibles y resilientes. Cifras preocupantes como la que señala que para el año 2050, el 70% de la población mundial vivirá en ciudades, o que para 2030 el consumo de agua crecerá entre un 40% y un 50%, hacen pensar en la importancia de la resiliencia de las ciudades, y en la necesidad de aumentar las capacidades de los territorios para contrarrestar las amenazas que sufren en la actualidad.
En la actualidad, 274 ciudades de América Latina han firmado ya el Pacto Global de Alcaldes por el Clima y la Energía, una alianza global de gobiernos locales que de forma voluntaria se han comprometido a desarrollar acciones para frenar el cambio climático, y que ya suma más de 9.149 ciudades implicadas. Uno de los objetivos del Pacto coincide con el enfoque del Día Mundial de las Ciudades de este año, ya que impulsa también la resiliencia en las ciudades, entendiendo que la identificación de los riesgos climáticos y el desarrollo de infraestructuras para limitarlos, es clave para que las sociedades se vuelvan más resilientes a la degradación ambiental.
Un ejemplo de buenas prácticas es de Santa Anita, en Perú, que busca impulsar la resiliencia y la sostenibilidad en su territorio. Santa Anita, una ciudad que sufre deslizamientos y derrumbes, ha puesto ya en marcha proyectos en las zonas geográficas más afectadas.
Por su parte, la ciudad de Corrientes en Argentina busca reducir el impacto, no solo de las inundaciones y las sequias que sufre, sino de la emisión de gases, así como mejorar la gestión de residuos.

La ciudad de Corrientes presenta su estrategia de desarrollo urbano sostenible
Peñalolen, en Chile, trabaja intensamente para mejorar su infraestructura, con la que busca poder hacer frente a desastres naturales que no son ajenos a la región.

Cartel en Peñalonen (Chile) que advierte a los bañistas de la localidad
La ciudad de Cartagena, en Colombia tiene una importante vida urbana pese a su cercanía a la costa. En los últimos tiempos, Cartagena se ha comprometido con el fortalecimiento de su infraestructura a través de su plan 4C de desarrollo, con el que busca que su crecimiento sea compatible con los efectos adversos del clima en la ciudad. Cartagena se encuentra implementando proyectos para limitar los posibles impactos del alza del nivel de agua en su territorio. Su deseo es convertirse en una ciudad más sostenible y resiliente, en línea con su compromiso con el Pacto Global de Alcaldes por el Clima y la Energía.

El Gobierno de Cartagena trabaja por la resiliencia de su ciudad
Acerca del Pacto Global de Alcaldes por el Clima y la Energía
El Pacto Global de Alcaldes por el Clima y la Energía reúne formalmente al Compact of Mayors y al Covenant of Mayors de la UE, las dos principales iniciativas de ciudades para ayudar a las ciudades y gobiernos locales en su transición hacia una economía baja en carbono y demostrar su impacto global. Dirigido por el Enviado Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para Ciudades y Cambio Climático, Michael R. Bloomberg, y el Vicepresidente de la Comisión Europea, Maroš Šefčovič, la coalición comprende más de 9.000 ciudades en 6 continentes y 119 países, que representan más de 684 millones de personas o 9,31% de la población mundial. Obtenga más información en https://diferreirafotografia.com.br/americalatina. El Pacto Global de Alcaldes por el Clima y la Energía de América Latina y el Caribe es el capítulo para América Latina y el Caribe que trabaja para establecer el Pacto Global en la región.